El pasado 2 de junio, PROA Comunicación celebró un encuentro en el Club Financiero Génova, para analizar la realidad social y económica española y, así, orientar a empresarios y diplomáticos latinoamericanos en la toma de decisiones profesionales.

El encuentro PROA-LATAM fue moderado por el escritor y periodista José Antonio Zarzalejos, una de las voces más autorizadas para indagar en la compleja coyuntura del país.

La socia directora de la consultora, Lucía Casanueva, dio la bienvenida a los invitados con la exposición de las bonanzas de una política económica abierta, liderada por la Comunidad de Madrid, centrada en la libertad empresarial y el respeto absoluto por la propiedad privada. Asimismo, subrayó la necesidad de conocer el contexto político y socioeconómico de España para posicionarse en un mercado que demanda nuevas necesidades financieras, y advirtió que la ausencia de este conocimiento acarrea “una posición de desventaja competitiva que puede ser irreparable”.

Fotografía realizadas por Sofía Royo

En palabras de Zarzalejos, PROA busca posicionarse como “un enlace inteligente que permita avanzar en el conocimiento necesario del país”, un puente que explora la realidad cultural y emocional que comparten España y Latinoamérica. Definió a PROA como una consultora estratégica que va más allá del ámbito de la comunicación, con el propósito “de incorporar inteligencia empresarial en la toma de decisiones”.

El agudo análisis realizado por Zarzalejos desentrañó múltiples temas de enorme relevancia y calado en la sociedad española: la tensión entre la libertad empresarial y el intervencionismo político, la seguridad jurídica y el sistema regulatorio, las contrariedades que subyacen en la gestión de los Fondos Europeos y la política exterior, la Crisis de Cataluña y las diligencias indagatorias al Rey Emérito por parte del Ministerio Fiscal; un desafío que el periodista presentó al público a fin de reflexionar sobre estas problemáticas.

A pesar de las amenazas que enfrenta la iniciativa privada en el país ­-–una excesiva intervención gubernamental en ciertos sectores, la pasividad de las autoridades públicas frente la ocupación o la mal llamada Ley de Alquileres­–, Zarzalejos ponderó en favor de un Estado de derecho y democrático que garantiza la iniciativa empresarial. Destacó que las oportunidades empresariales más interesantes se focalizan en el sector industrial y argumentó la necesidad de relocalizarlo, ya que “España no tiene industria estratégica”. Además, aconsejó discriminar dónde se realizaban las inversiones en el país, el cual cuenta con una variedad regional notable por razones fiscales, burocráticas y demográficas, y analizar cuál es el momento propicio: “Estamos en una fase de reconstrucción que ofrece años de oportunidad”.

El debate se encauzó hacia el papel geoestratégico que juega España en Latinoamérica y su política exterior. El escritor destacó el papel que las grandes empresas internacionalizadas –Banco Santander, Ferrovial, Iberdrola, entre muchas– están jugando en el continente y la presencia que poseen en el comercio. Sin embargo, advirtió de las ineficiencias de la política exterior en los países latinoamericanos en los que, en muchos casos, existen graves interferencias que obstaculizan la normalización de la política exterior según los criterios de la Unión Europea. En este sentido, se refirió al carácter unipartidista y a las restricciones de las libertades que sufren algunos países a través de una élite asentada en el poder sin legitimización democrática, como es el caso de Venezuela y Cuba. También discutieron sobre la opacidad de la política exterior, una de las causas por las que el reciente informe España 2050 rehúye de la realidad latinoamericana; un informe que no propone soluciones ni proyectos destinados al continente.

Fotografía realizadas por Sofía Royo

En relación al contexto europeo, señalaron la oportunidad que presentan los Fondos de Recuperación Europeos y los riesgos que conlleva la gestión politizada por parte del Gobierno en detrimento de un organismo independiente más transparente y ecuánime. Asimismo, se puso en duda la asignación de las partidas correspondientes que, en palabras de Zarzalejos, son insuficientes para transformar la economía y solucionar, entre otras cosas, el desempleo juvenil, que en estos momentos supera el 35%.

Por último, discutieron sobre las dos crisis de gran calado social que están deteriorando el corazón del Estado español. Por un lado, la crisis institucional de Cataluña, que arrastra un proceso de sedición a la espera de cómo el Gobierno actual pretende abordarlo; por otro, una crisis de Estado vinculada al Rey Emérito, quien está expatriado, en la que pesan sobre él tres diligencias indagatorias del Ministerio Fiscal.

El encuentro PROA-LATAM sirvió como un espacio de reflexión al servicio de los empresarios y diplomáticos latinoamericanos, un acercamiento a los desafíos que presenta la política internacional y la batalla política en favor de la libertad económica. Con este diálogo, PROA busca convertirse en una referencia basada en la confianza, una brújula que oriente en un mar convulso y lleno de desafíos.

Fotografía realizadas por Sofía Royo